16:10 | Autor: Daniel Aréchiga
En esta ocasión quiero dirigir mis comentarios hacia un servicio que ofrece la ciudad de Valladolid que desde mi particular punto de vista es una muestra de cómo se debe ofertar un servicio de calidad: el transporte público.

Desde que recuerdo en mi ciudad natal -Guadalajara en México- siempre ha habido quejas por el mal servicio que presta el servicio de transporte público. Los vehículos utilizados, las rutas, los horarios, los precios, que si los choferes y muchas cosas más. Tengo recuerdos poco agradables de las “combis”, de cuando viajaban colgados de las puertas hasta aquellos muertos cerca de Belenes, las carreras por ganar pasaje y lo poco confiable en cuanto a tiempo que resulta el servicio. Ahora en Valladolid me encuentro con un servicio eficiente en todos los sentidos, del que quiero explicar cuáles son las razones que me hacen así considerarlo.

No sabría por donde comenzar, porque todas las razones me parecen relevantes, pero inicio con el tipo de autobuses. Olvidemos todos los sabores y colores: los camiones, minibuses, midibuses, combis, los alianza, los sistecozome, etc. Aquí existe un solo tipo de buses, todos pintados del mismo color y administrados por una sola instancia, el Ayuntamiento. Lo que hace la diferencia para conocer la ruta son las pantallas que tienen todos los buses por los 4 lados del vehículo, lo que permite identificarlos fácilmente desde cualquier punto que se observen.

Los buses además deben de cumplir con las normas europeas que dictan la altura, distribución, señalamientos, etc. también cumplen con normas respecto a cuidado al ambiente. Son buses cómodos y accesibles que cuentan con características que permiten el fácil acceso hasta con carriolas con bebés, por lo tanto también facilitan el acceso a personas mayores o con características especiales. Cuentan con piso plano, es decir, no tienen escalones para ingresar ni en su interior. Y como complemento al vehículo está el conductor, que todos viajan uniformados y sin aplicar peluches ni “mejorar” el entorno auditivo con sus cumbias o duranguenses.

Otra característica importante es lo confiable respecto a los tiempos y horarios, ya que se tienen definidos horarios de salida inicial para cada ruta con una periodicidad exacta, que además se complementa con las paradas que están perfectamente definidas, y estas paradas siempre tienen los horarios de las rutas que allí llegan, teniendo inclusive en muchos lugares una pantalla que te indica el tiempo estimado en que llegará el próximo bus de todas las rutas que allí arriban. Igualmente existen rutas especiales, tales como las rutas búho que circulan por la noche o las rutas especiales cuando hay partidos de futbol, de forma que cualquier persona se puede programar porque sabe cuando pasará un bus que lo acerque a su destino.

A esto le podemos agregar que además de poder pagar en efectivo con monedas o billetes, la mayoría de la gente –más de un 90%- paga su boleto con las tarjetas “Bonobus” que es un sistema de prepago que consiste en una tarjeta plástica como las de telefonía que puede ser recargada en bastantes puntos por toda la ciudad, esto implica ahorros importantes, tanto en tiempo como en dinero, ya que pagar con Bonobus implica pagar aproximadamente un 60% del precio que sería pagado si pagamos en efectivo, además que en cada bus hay hasta 3 lectores de tarjetas por lo que el acceso de los usuarios se vuelve mucho más rápido comparado con el tradicional acceso en el que todos deben pagarle al conductor.

Por último y no menos importante, la información que proporciona la compañía a sus usuarios es muy completa, a través de carteles, pantallas, folletos y su página web (http://www.auvasa.es/), por lo que conocer las rutas, los cambios temporales de rutas o cualquier otra información que nos resulta útil a los usuarios es muy fácil de obtener.

En general es un servicio muy eficiente que te permite confiar en el y sobre todo, te invita a no utilizar el auto, algo muy importante en la actualidad por la contaminación, tráfico y el estrés que se puede evitar.
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